Los coches voladores aún no han llegado al mercado, todavía no tenemos a nuestro alcance mayordomos cibernéticos que nos saluden con voz metálica al llegar a casa… todos esos ingenios pertenecen al futuro, pero de todas formas no somos conscientes de la cantidad de gadgets revolucionarios con los que convivimos.
En este post vamos a hablar de las futuristas cualidades del Samsung Galaxy Gear: el reloj que imaginábamos para James Bond. Sí, sí… hemos dicho reloj, que no sólo de smartphones vive el gigante coreano.
En 2013 se lanzó la primera versión del smartwatch Gear: un reloj hiperconectado que funcionaba con el sistema operativo Android. La conectividad con el teléfono hacía que muchas de las funciones de este se extendieran a la propia muñeca. Ese smartphone era una versión menos actualizada del Galaxy Gear disponible ahora en el mercado
Hace menos de una semana se anunció la llegada al mercado la última versión de Gear, se trata de un dispositivo mucho más potente y versátil que aquel primer modelo.
La principal novedad es que a partir de ahora correrá con la versión para weareables de Android, la conocida como Android Wear, esto hace que las funciones clásicas de notificación (mensajes, mails, alertas de calendario…) y cuantificación (desde el tacómetro al ritmo cardiaco) ganen en profundidad con la integración de Google Now y sus tarjetas de información. Ahora podremos hablar al reloj, sólo con decir “Ok Google” responderá a nuestras preguntas. Obviamente no a todas, pero sí a las que pueda identificar, por ejempo “qué tiempo va a hacer mañana” o “cuando juega el Betis”
Pues así es, todavía no está disponible pero será mejor que estés atento a la página oficial de Samsung para enterarte del lanzamiento de Gear en España.
Cuando nos queramos dar cuenta ya andaremos por la calle igual que el célebre Michael Night: hablando al reloj. Eso sí, el coche de Google todavía no está disponible, pero todo se andará… que están haciendo pruebas de coches que se conducen automáticamente.